GRACIAS

De entrada, perdonad la humorada de las fotos, ya conocéis mi sentido del humor. Y os reto a que el próximo martes en el aula de informática hagáis algo parecido con mi foto.

Sarai, aunque ya te he contestado en tu blog, quiero también hacer público mi agradecimiento: Gracias, Sarai. Gracias a todos, pequeña familia. Lo de los jamones que os debo lo hablaremos con más calma en clase, jeje. Ya os dije que no soy de lágrima fácil, pero casi casi lo conseguís. Gracias por expresar vuestro deseo de que me quede con vosotros, ya sabéis que a mí también me encantaría. También os dije que todavía es posible que así sea. Pero no está en mis manos ni en las vuestras. Y aunque no lo veáis y os parezca injusta, la forma de elegir qué profesores van a qué institutos intenta ser lo más justa posible, de verdad. Hay un proverbio chino (“proverbio”, la primera con V y la segunda con B, como “verbo, adverbio”) que dice: "Si un problema tiene solución, no hace falta preocuparse. Si no tiene solución, preocuparse no sirve de nada.”

Y he dejado para el final LO MÁS IMPORTANTE: no penséis ni por un segundo que lo que habéis aprendido es gracias a mí, no penséis ni por un segundo que de no estar yo suspenderíais el próximo curso. Esto es precisamente lo que he intentado enseñaros durante el curso: que podéis aprender lo que os propongáis por vosotros mismos, que valéis, que lo único que tenéis que hacer es creerlo, esforzaros e intentarlo. Recordad el relato del niño que consiguió salir de las aguas heladas. Y sólo porque nadie le había dicho que eso era imposible.